jueves, 9 de junio de 2011

Libertad....

leyendo el devocional encontré algo que quiero compartir con Uds.:


Y es, acerca de la libertad que solo a través de Jesucristo podemos alcanzar.

Somos llamados a proclamar la libertad para la conciencia, no la libertad de opinión y si nosotros mismos, somos libres con la libertad de Cristo, otros entraran a esa misma libertad, la libertad de comprender su autoridad, la autoridad de Jesús sobre nuestras vidas.

La persona que es spiritual nunca vendrá a ti para exigirte que creas esto y aquello , sino para que ajustes tu vida a las normas de Jesús.

No se nos pide que le creamos a la Biblia, sino a Jesús que es a quien la Biblia revela

Juan 5:39 (La Biblia de las Américas)


39Examinan las Escrituras porque ustedes piensan que en ellas tienes vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;

Midamos constantemente nuestra vida de acuerdo con las normas de Jesús.

Sometámonos a El y no a nadie más y tengamos cuidado de no imponer a otros, normas que Jesucristo no les haya impuesto.

Recuerda de no impacientarnos con los demás, Dios trato contigo y conmigo con paciencia y benignidad.

Dejemos actuar la verdad de Dios, ella actúa por si sola……..!!!

Bendiciones;

Nelson

sábado, 4 de junio de 2011

Deje a los niños ser niños.

Evitar tener conversaciones frente a sus hijos(a) relacionadas con finanzas, horarios de visita, disputas familiares y otros problemas,es una manera de mantenerlos sanos y alejados de los conflictos familiares para lo cual el niño no esta preparado. No lo utilice para transmitir información o ponerlo en el centro de los conflictos pues esto le traerá graves vacíos en su desarrollo como adolescente y luego como adulto. Preserve y proteja su inocencia.Recuerde su hijo no puede ser su confidente,porque emociolnalmente y espiritualmente no esta preparado,solo es un niño.


Sin importar lo que el mundo diga al respecto, el divorcio es un golpe devastador para un niño. Permanezca sensitivo hacia su hijo y haga de su sanación una prioridad.

Recuerde, Dios es suficiente para sanar y restaurar la esperanza a cada corazón, incluso al de su hijo (a). Su trabajo es proveer un hogar seguro, estable y piadoso. El resto depende de Él

tomado de :http://www.enfoquealafamilia.com/default.aspx?cat=96&aid=&anum=0
y adaptado por Nelson Mazuera